La Sra. María recorría las calles de Talca con un carro de supermercado, buscando en los desechos y basuras de los vecinos, posibles artículos para vender en la feria de las pulgas de la ciudad y de esta forma, mejorar la escasa pensión que recibe, tras la muerte de su marido en el terremoto de 2010. Con sus piernas y brazos cansados, solo pedía un triciclo para no tener que empujar el carro, ya que ella no se da por vencida y quiere seguir trabajando. Es una mujer luchadora que solo pedía una oportunidad. Gracias a la ayuda anónima de un grupo de amigos, se logró comprar un triciclo y de esta forma, cumplir con el sueño de esta gran mujer, que es conocida por sus vecinos por tener un gran corazón y por compartir lo poco que tiene, con los que más lo necesita. Tan así, que cuando Desafío Levantemos Chile llegó con su triciclo, una vecina fue y le dijo:” ve, a la gente buena le pasan cosas buenas.” Hoy la Sra. María tiene más fuerzas que nunca, porque ha visto que podrá seguir recorriendo las calles de Talca, ahora no solo buscando objetos para vender, sino que en su nuevo triciclo podrá llevar a cabo un nuevo emprendimiento, vendiendo flores y cumpliendo así, su sueño. Gracias a quienes permitieron ser parte de esta gran cadena de favores, gracias a quienes devolvieron la esperanza y fe a la Sra María.